domingo, 28 de agosto de 2011

ERRAR ES DE HUMANOS, PERDONAR ES DE PERROS.


Duque esperaba paciente a Lucas en el banco de siempre. Al día siguiente haría un año que se conocieron y, mientras esperaba, hacía recuento de ese año. Él era un perro golden retriever de pelo largo y dorado, era noble y de buen carácter y quiénes le conocían le tenían un gran aprecio. Lucas, que vivía a unas cuantas manzanas de Duque, era un niño de 8 años sociable y encantador cuya mascota y mejor amigo era su gato Sultán.

Recordaba cuando conoció a Lucas, era un día de marzo soleado. Lucas lanzó un leño al lago y Duque recogió el leño para jugar, desde entonces no habían dejado de jugar en el lago ni una sola tarde, tan sólo los días muy lluviosos faltaban a su cita. Cada día, mientras caminaban hacia el lago, Lucas le hablaba de Sultán: “Es un gato muy listo, y muy ágil, ha conseguido el premio del salto más alto en el concurso del año pasado…..” Duque miraba con atención a Lucas y deseaba que algún día hablase con ese brillo en los ojos de él. Mientras Lucas, ajeno a los deseos de Duque, seguía contando sus planes de futuro: “Sabes Duque? Sultán y yo nos iremos a recorrer mundo cuando yo sea mayor, conoceremos todos los países y no nos separaremos nunca” lo decía con cierta emoción en la voz mientras Duque sentía que el corazón se le encogía, qué sería de él entonces?…… Sacudió su cabeza, a Duque no le gustaba recordar esas sensaciones, él estaba contento con Lucas, estaba muy orgulloso de ser su amigo y no pedía nada más, además, al día siguiente se cumpliría un año desde que empezaron su amistad y estaba seguro que le traería un gran hueso. Todavía recordaba la lata de sardinas que compró para Sultán en su último aniversario, Duque le había acompañado a comprarla, se imaginaba la cara de Sultán al recibirla, si hubiese sido él le hubiese llenado la cara de lametazos como haría al día siguiente cuando le entregase su hueso.

De pronto se dio cuenta que el sol estaba muy bajo, desde cuando estaba esperando a su amigo? Mientras recordaba el año juntos se le había pasado el tiempo volando y no se había dado cuenta que Lucas no llegaba. Preocupado decidió acercarse a su casa, desde la verja vio que en el jardín había una gran fiesta con música. Allí estaba Lucas y Sultán con más niños y mascotas, todos reían contentos porque Lucas había conseguido la beca tantas veces soñada para aprender a tocar el órgano. Duque movió el rabo contento, un hurra por su amigo! Y empezó a ladrar para avisarle que estaba allí, seguro que con la emoción se le había olvidado avisarle. Pero nadie le oyó, la música estaba alta y Lucas se olvidó de Duque….

Al día siguiente fue fiel a su cita en el parque, su rabo bajo y su cara triste transmitía lo que sentía, aunque sabía que el gran hueso que le esperaba como regalo de aniversario le arreglaría el día. Lucas al verle entendió el estado de ánimo de su amigo, así que antes de encaminarse al lago se sentó en el banco y le dijo: “Verás, me han concedido la beca tan ansiada, ayer hice una fiesta y me olvidé decirte que no acudiría a nuestra cita, entenderás que era una fiesta para allegados, tú eres mi amigo de juegos, no eres un allegado, lo entiendes verdad? Además, ese tiempo le correspondía a Sultán, entenderás que no deje a Sultán para venir a celebrarlo contigo verdad?” Duque supo entonces que ese día no tendría hueso, ni viajaría nunca por el mundo al lado de Lucas, ni harían juntos todas esas cosas que hacen los “allegados”.

No, no lo entendía.

“Un perro es la única cosa en la Tierra que te amará más de lo que tú te amas a ti mismo”

Josh Billings.

7 comentarios:

Alforte dijo...

Aysss que bonito el amor perruno, después de leerte que ganas de tener uno jejeje
Guau Kisses

Who dijo...

Precioso Silver, magnífico reflejo de la sociedad actual : El egoísmo.
Los intereses creados, la no vinculación en las relaciones, se tienen amigos como se tienen zapatos para bailar, para correr, para fiestas, para playa..... todo separado y cumpliendo su función para la aque fueron creadas, igual que las amistades, igual. Has reflexionado de manera elegante y aparentemente superficial sobre este asunto tan mísero como real. No puedo dejar de felicitarte por escribir una denuncia y un basta ya con tanto arte.
Un beso muy fuerte de admiración y amistad atemporal y sin barreras, Who.

JL dijo...

UFFFF pero que triste que me dejas... pobre Duque, me lo pido para mi.
Ya empiezo a pensar q mejor un perro q una pareja, como se ve siempre estarán a tu lado ;)
Totalmente de acuerdo con lo que dice Who.

cachos de vida dijo...

Magnífico relato, tierno y con moraleja. Cuando creemos tener un amigo, apenas es un conocido. Por descontado que no estamos entre sus allegados.
silver, muchos besos.

Jordi Gil dijo...

Yo que soy un perro mas viejo que Duque, le diria que haga lo que quiera hacer, lo que cree que esta bien, que acuda todos los dias a la cita si eso le hace feliz, pero que no espere lo mismo de los demás perros. Hay mucho perro tonto suelto.

Silver's Moon dijo...

Jajajaa Alforte te aseguro que dan muuuuuuuchas satisfacciones.

Muchas gracias Who! todo un honor tus elogios. Ojalá supiésemos cuidar y valorar siempre a los seres que tenemos a nuestro alrededor

JL, desde luego, ganarás en lealtad, eso seguro.

Triste Disancor, pero cierto, pero bueno ellos se lo pierden no? ;-P

Jordi muy inteligente tu consejo, seguro que a Duque le vendría de perlas, por lo que parece tiene que aprender a no tener expectativas.

UN BESO GIGANTE PARA LAS 5 Y COMO SIEMPRE, MI AGRADECIMIENTO POR VUESTROS COMENTARIOS Y VUESTRA VISITA....AAAIINNNSSS QUÉ SERÍA DE ESTE ESPACIO SIN VOSOTROS...

Silver's Moon dijo...

Feliz finde Dis
Un beso enorme con achuchón