A veces, hablando con alguna amiga, me ha dicho que quiere tanto a su pareja que si algún día él la fuese infiel puntualmente ella preferiría no enterarse. Yo no. En el amor, el refrán de "ojos que no ven corazón que no siente" no va conmigo. Yo quiero ver, quiero verlo todo, quiero comprender y conocer a mi pareja o aceptar que nuestra relación no es posible. Quiero amar con los ojos abiertos, no quiero que mi amor sea ciego, porque ciego es más fácil que se tropiece y se caiga, porque no se me da bien ir a tientas....
Si voy con los ojos abiertos, si consigo mirar y aceptar a mi pareja como un ser individual será más difícil que me decepcione. Y es que, la mayoría de las veces, plasmamos en la pareja nuestras necesidades y carencias, necesitamos que sean ellos los que nos salven con su amor. Con este pensamiento es fácil que tras una primera etapa de ilusión y enamoramiento la venda se caiga y nos encontremos con una persona que no está dispuesta a salvarnos, que lo único que pretende es caminar a nuestro lado, disfrutar del tiempo juntos. En mi caso no cayó la venda en una primera etapa, sino después de varios años de relación, nos tendríamos que haber alegrado los dos, porque hasta entonces vivíamos el uno para el otro, nuestra prioridad era hacer feliz al otro y después a nosotros mismos, Fuimos felices los años que duró, pero con esa actitud la relación tenía los días contados. En cuanto uno de los dos bajara la guardia el castillo se desmoronaría y finalmente el castillo se derrumbó.
El problema es que no supimos que hacer con nuestra recién estrenada individualidad, parecíamos bebés intentando dar sus primeros pasos. Habíamos aprendido una forma de relacionarnos y de convivir y a partir de que la venda se cayera y empezáramos a ver con claridad nos encontramos perdidos. Esa fue la razón de que nos perdiéramos.
Pero he aprendido, o eso creo, porque siempre intento aprender de cada revés. Ya no quiero vivir para nadie, quiero vivir con alguien que me ame y que le apetezca que caminemos juntos. Quiero escuchar, observar y aprender de la persona a la que ame, quiero explorar con inocencia nuestras diferencias, sin intentar traerle a mi terreno y sin dejar que me arrastre al suyo. Porque si me quedo sólo con mi forma de ver la vida, no la enriqueceré, será siempre lo mismo, pero si me intereso por entender las emociones y formas de pensar de mi pareja, no sólo habré incorporado cosas nuevas a mi vida, habré aprendido y sobre todo tendré a mi lado a una persona individual y no seremos una marioneta en manos del otro o un clon de nosotros mismos
"No esperes nada de mí y no te decepcionaré"
imagen sacada de 1111producciones.blogspot.com
9 comentarios:
Cerrar los ojos no es el mejor sistema. Se debe amor con los ojos abierto, con los cinco sentidos, con todo el cuerpo. Entrega total.
Tú forma de pensar es maravillosa. Tendrás suerte y tendrás un hombre que te quiera de la misma manera.
silver´smoon, hasta el lunes.
Pues tampoco estoy de acuerdo de ojos que no ven corazon que no siente.
En una pareja lo que debe prevalecer es la plena confianza, no depender en absoluto de la otra persona porque esto al final afixia a la otra persona lo importante es la individualidad de cada uno, amar no es condicion de posesion, es entregar nuestro corazon pero la libertad como individuo, dejar ser el mismo, no quererlo cambiarlo.
Con cariño
mari
Difícil de entender para muchas personas el tema de la INDIVIDUALIDAD dentro de una pareja. Comparto tu mismo punto de vista.... "quiéreme mucho, pero primero déjame que me quiera yo".... Me quedo por aquí. Un beso de agua que ha aprendido a fluir solita (en pareja).
Ut dijo...
...Y por supuesto que encontrarás a esa persona, seguro que te está esperando en algún lado, solo tienes que encontrarle y empezar esa nueva vida.
Tienes la capacidad de conseguir todo lo que te propones, lo sé... solo tienes que saber lo que buscas.Elige bien.
besos cosa guapa
Ut
La verdad es que es una interesante reflexión.
Yo tampoco creo en éso de Ojos que no ven.Prefiero saber y conocer,para así afianzar la relación y el amor en el mutuo conocimiento del otro.
En cuanto a las relaciones de parejas,creo que todo es teoría,y que cada pareja evoluciona de manera distinta,y cada día.Así que es difícil imponerse una teoría antes de iniciarla.Las cosas evolucionan,unas mejoraran y otras pareceran que no,y es decisión individual el querer seguir o no.Al final verás con todos los comentarios que no es una ciencia exacta.
Ahora bien,hay que amar...siempre!!!...dure lo que dure.
Un beso!!
A veces, si mucho lo intentas y nunca sale, piensas que en algo te equivocas. Pero aún no lo he intentado tantas veces como para pensar que me equivoco. Creo que la gente cuando se enamora no se da cuenta que es una carrera de fondo y con obstáculos, y no los 100 metros lisos. Eso si, hay obstaculos que no quiero saltar, y el de ocultar cosas al otro es uno de los que no salto.
Eso es disancor, con los 5 sentidos, así es como me gusta amar, sin perderme nada... No sé si alguna vez volveré a ser afortunada en ese sentido, por ahora no me puedo quejar, la vida me ha regalado mucho amor.
Desde luego eso es muy importante estoy viva, el respetar a cada uno como es sin intentar cambiarlo es primordial. Muchas gracias por incorporarte a mi blog y bienvenida.
Bienvenida a ti también Agua, estoy de acuerdo contigo, si yo me quiero entonces puedo quererte, de otra manera es imposible. Felicidades por haberlo conseguido!!
Siiiiiii Ut, como decimos algunas veces encontraremos unos gemelos maravillosos, (uno gay y otro hetero claro) que nos van a saber amar en condiciones y a los que amaremos de la misma manera y seremos felices y comeremos perdices! y además seremos cuñadooooos!!!! jajajaja
Si Alex, hay que amar, eso siempre. Y si sale mal pues nos echamos sal y limón al corazón para las cicatrices y para delante, pero que nos quiten lo "bailao". Por cierto, pensé que te había agradecido tu visita en el comentario a tu blog y ahora releyéndolo me dí cuenta de que no :S. Así que te doy mi más calurosa bienvenida y te agradezco infinito tu participación en mi blog.
Si Jordi, a mi me ha pasado lo de pensar en qué me estaba equivocando y eso que no lo he intentado tantas veces... cuando una relación falla es díficil evitar pensar qué hicimos mal, aunque luego asumamos que no tenemos por qué habernos equivocado simplemente así son las cosas y hay que aceptarlas. Coíncidimos en el obstáculo que nos negamos a saltar.
Como siempre un beso goooordo a todos y muchíssisisimas gracias!!!!
Muy buena reflexión, a la que he llegado también a fuerza de vivir relaciones y equivocarme.
Es muy difícil ser uno mismo y ser parte de una pareja, aunque no imposible, pero es necesario que la otra parte se base en el mismo ideal de pareja.
A veces me planteo cuál es la línea que separa la individualidad del de enfrente sin chocar contra mi propia visión de qué es una pareja. Qué aspectos son básicos para mi, a los que no puedo renunciar en cuanto a lo que mi pareja tiene que ofrecerme, y qué aspectos son movibles, cuya línea se puede mover hacia un lado o hacia otro, sin que eso atente contra la individualidad de mi pareja ni contra los principios básicos de lo que es una relación para mi.
Has dado con la raíz del problema Adriano, eso es lo más difícil también para mí, encontrar el punto medio que respete la individualidad de ambos y mis necesidades básicas de pareja.
Un beso gordo y gracias por tu comentario
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